9 de Abril 2006
Los peperos también salen del armario
Tarde o temprano, tenía que llegar; aunque algunos se empeñen en ponerle puertas al campo y negar la evidencia, la homosexualidad está presente en todos los ámbitos sociales e incluso, para rasgada de vestiduras de Acebes y los suyos, en las filas del Partido Popular.
En el día de ayer contrajo matrimonio el concejal de cultura del Ayuntamiento de Orense, José Araujo, con su pareja de hace años, un empresario del lugar. La boda fue oficiada por el propio alcalde pepero de Orense, e incluso entre los invitados estaba el sustituto de Fraga al frente del PP gallego, Alberto Núñez Feijoo. Corbatas, pamelas y demás accesorios de pompa y boato no faltaron a la celebración, en la que por lo visto se eligió como tema musical un bolero compuesto por el humorista Moncho Borrajo ( gay declarado) con el significativo título de Cuando dicen que el amor es pecado...
El acontecimiento no pasaría de anecdótico (salvo para sus protagonistas) en un país medianamente civilizado, pero esto es España, el país que siempre camina al borde del abismo. Recordarán ustedes aquellas multitudinarias manifestaciones en las que, con los fantoches que manejan el PP a la cabeza, se avisaba a pecadores e impíos sobre el advenimiento del juicio final directamente sobre sus cabezas, y se predecía con fuego y azufre el fin de los tiempos, la llegada del anticristo y un sinfín de plagas malignas que acabarían con la sociedad y todo el universo conocido.
Meses después, resulta que el tinglado aun sigue en pie...los homosexuales que lo han creído oportuno se han casado, y los que no, pues no. Los adictos a la comunión diaria no se han visto privados de su divina ración, y el resto de los mortales seguimos enfrascados en nuestras disputas futboleras de turno. El mundo sigue girando pese a nuestros denodados esfuerzos para que no lo haga, y algunos seguiremos observando con un leve halo de esperanza pequeñas historias de cada día como ésta.
Que sean felices y coman perdices.
